Hay cosas que nunca entenderé. Como por ejemplo por qué el ser humano se conforma con cosas que simplemente no existen. Por qué no solo se conforma sino que las ansía. Por qué se tira al vacío, a un vació que desconoce. Nunca entenderé esas ganas de sentir que flotas por unos instantes aun sabiendo que después de eso viene una caída estrepitosa. ¿Con qué fin? ¿Para qué?
Tampoco entiendo el hecho de que todo dure tan poco. En cierto modo lo prefiero, aquello efímero es mil veces más bonito que lo eterno. Aun con todo, hay cosas que son demasiado efímeras, cosas que de contener algo más de eterno, inmenso u absoluto superarían con creces a lo efímero.
Otra cosa imposible para mi es luchar por una batalla ya perdida. Es un completo sinsentido como andar intentando atravesar una pared de ladrillos. En el momento en el que ya no queda nada no hace falta seguir perdiendo. Hay que remontar, cambiar de actitud frente a eso que no podemos solucionar. ¿Por qué la gente se empecina en cambiar el mundo cuando el mundo NO va a cambiar? ¿Por qué los periodistas tenemos la obligación de querer cambiarlo? Ese no es nuestro trabajo. No. Debemos mostrar la realidad y en todo caso mostrar realidades que algunas personas esconden. Pero más allá de eso, no podemos hacer NADA. (En este aspecto se ve claramente mi poca vocación periodística, yo no concibo el mundo como mis compañeros). No veo el mundo como algo que esté en nuestras manos. No, el mundo es algo en lo que nosotros contribuimos pero no controlamos e intentar hacerlo sería una gran estupidez. (Comparable a la voluntad de muchos científicos de crear vida, qué estupidez más grande. Querer controlar hasta eso, con lo maravillosa que es la incertidubre de no saber cómo surgen las cosas). Supongo que por eso prefiero escribir a ser periodista. Prefiero inventar mi propio mundo con problemas incluidos, que sufrir los reales más de la cuenta e intentar solucionarlos cayendo en la derrota perpetua de aquel que solo por no perder no juega.
El Mundo más que injusto es rematadamente estúpido. Y parece que nadie se ha dado cuenta pues todos siguen clamando al cielo el porqué de sus desgracias. Cuando en el fondo todo es una simple tontería y las cosas pasan porque pasan sin ninguna causa concreta, simplemente porque dentro de la estupidez del mundo está escrito que pasen y ahí, en mi opinión, tampoco podemos hacer nada. Claro está que mi opinión para muchos será más estúpida que para mí el propio mundo, pero en realidad, y aunque se empeñen en negarlo, mi punto de vista lo han compartido todos en algún momento que otro.
Liia'11
demasiadas cosas que puntualizar...
ResponderEliminar